¿Cuál es el futuro del compromiso online?

¿Qué pasaría si... la participación en línea se convirtiera en una parte integral de la vida cívica, promoviendo el acceso de los residentes que históricamente han sido excluidos de las reuniones presenciales típicas?

A medida que los estados comienzan a flexibilizar las órdenes de confinamiento, ¿con qué rapidez volverán las comunidades a celebrar reuniones públicas presenciales? ¿Las organizaciones que nunca antes habían celebrado reuniones en línea aprovecharán las ventajas recién descubiertas de la participación virtual, o las reuniones virtuales se convertirán en un episodio efímero de la historia a medida que las cosas vuelvan rápidamente a la normalidad? La participación en línea ha sido crucial durante la pandemia de COVID-19, pero ¿qué pasaría si se convirtiera en una parte integral de la vida cívica, promoviendo el acceso de los residentes que históricamente han quedado excluidos de las reuniones presenciales habituales?

Las reuniones virtuales no son la panacea para una participación ciudadana auténtica y eficaz. Las organizaciones no pueden limitarse a superponer la tecnología a las desigualdades estructurales existentes y esperar obtener mejores resultados. El personal debe realizar la ardua tarea de examinar sus procesos y políticas para asegurarse de que no están agravando involuntariamente la brecha o empeorando el problema. Una reunión de Zoom o el sitio web de un proyecto no pueden reparar mágicamente las relaciones ni resolver los problemas de confianza que existen desde hace tiempo en una comunidad. En cambio, las herramientas en línea forman parte de un conjunto más amplio de herramientas a las que los líderes comunitarios pueden recurrir para ampliar la representación y la participación.

En lugar de limitarse a reproducir una reunión física, una reunión virtual es una oportunidad para reestructurar la forma en que se llevan a cabo las reuniones públicas. Una reunión virtual puede utilizarse para reequilibrar las dinámicas de poder que se dan en las reuniones presenciales tradicionales y hacerlas no solo más equitativas, sino también más conformes con la ley. Por ejemplo, imaginemos una controvertida audiencia pública en la que una sala abarrotada de personas que se oponen a una propuesta, que puede cumplir todos los requisitos legales para su aprobación, influye claramente en los funcionarios electos para que se inclinen en otra dirección. Por supuesto, no es así como se supone que deben funcionar las audiencias públicas, pero las pruebas demuestran una y otra vez que así es como funcionan muchas de ellas en la realidad.

En teoría, las audiencias públicas son una muestra de cómo funciona un gobierno representativo, donde los funcionarios electos toman decisiones basadas en criterios objetivos. En la realidad, muchas audiencias públicas se ven como mini elecciones. La gente puede mostrar su apoyo o oposición con solo estar presente en una reunión en persona... algo que una reunión virtual elimina. Al no sentirse intimidados por una multitud de gente enojada, ¿esto les da más libertad a los funcionarios electos para tomar mejores decisiones? ¿O viola la libertad de expresión y el derecho a reunirse? Como mínimo, va en contra de tradiciones arraigadas desde hace mucho tiempo en la cultura estadounidense. Un número sorprendente de personas sigue queriendo acudir a una reunión física, tener la oportunidad de hablar durante 3 minutos o simplemente mostrar su apoyo u oposición con su mera presencia. Puede que haya formas de replicar esta experiencia en un entorno virtual, pero la cuestión de si debemos replicarla sigue sin resolverse.

Afortunadamente, no es necesario cambiar por completo los métodos tradicionales de reunión para seguir utilizando herramientas en línea que hagan el proceso más inclusivo y accesible. Si pasar a un formato 100 % virtual no es viable ni deseable, la organización puede adoptar un enfoque mixto que permita a las personas elegir entre asistir en persona o en línea.

Konveio ofrece una forma cómoda para que las personas aporten sus opiniones, ya sea durante una reunión o una vez finalizada. La ciudad y el condado de Denver utilizaron Konveio para crear un taller digital para su Iniciativa de Planificación del Barrio Centro-Este. Subieron un vídeo de la presentación que se realizó en un taller presencial para que aquellos que no pudieron asistir pudieran ver lo que se perdieron. También subieron los mismos carteles que se utilizaron en el taller, sobre los que los visitantes del sitio web pudieron comentar directamente, tal y como lo habrían hecho en persona.

LEA NUESTRO CASO PRÁCTICO DEL TALLER DIGITAL DE DENVER

Hemos observado en los numerosos proyectos en los que Konveio ha proporcionado herramientas de interacción con contenidos que la calidad de los comentarios tiende a ser mayor en Internet. Esto se debe a que las personas pueden tomarse su tiempo para comprender el material y formular respuestas bien pensadas. Esto es especialmente cierto cuando se les pide que den su opinión sobre algo concreto, en lugar de responder a preguntas abiertas.

Haga clic a continuación para ver una breve demostración y obtener más información sobre cómo Konveio puede ayudarle a combinar la participación presencial y en línea.

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